Es parte de la vida

 

 
Llegaste y solo fue tu mirada la que me impacto
pero mas allá había algo muy profundo, algo
como un poco desconocido para mi, no me di cuenta
pero cuando me adentre en tu ser comprobé que era verdad.
 
Acababa de enamorarme como un adolescente en su primera vez
pues sentí esas cosas de antaño, esa inquietud, ese será o no?
me repetía una y mil veces me aceptara o no? pero si estaba seguro
 que ya de aquel camino no podría salir pues era una calle sin salida.
 
Yo que me sentía como un niño pero pensaba como adulto
no vacile en enamorarte y con mi suave hablar y lánguida mirada
logre muy rápidamente conquistarte y arrastrarte a mis brazos
fue algo tan maravilloso cuando me dijiste bésame en los labios.
 
Poco a poco nuestro amor fue creciendo yo me sentía tan feliz
que solo esperaba nuestro diario encuentro para decirte te amo
y a la ves escuchar de tus hermosos labios yo te amo a ti también
pasábamos horas embriagados con el néctar de nuestras bocas.
 
A veces no me veías y te sentías inquieta al no encontrarme
ya me había convertido en una necesidad constante en tu vida
pero cuando nos veíamos con una calida sonrisa me decías, te espere
pero no había un reproche, ni un celo, así era nuestro amor.
 
Ese amor casual o causal en mi vida llego como para quedarse
yo lo sentía así, tus mimos me acostumbraron a creer en ti
un solo pensamiento habitaba mi alcoba ella es mía y será mía
para toda la vida, mas que equivocado estaba.
 
No quiero juzgar tu amor si fue cierto o solo un capricho
no quiero hablar de ti y sin embargo tengo que hacerlo
una historia dolorosa se arrimaba a mi feliz corazón
historia de intriga, de mentiras, incrédulo yo estaba.
 
Nada me habías dicho pero yo presentía algo, te sentía fría
entonces te lo dije, algo a ti te pasa pues evades mi mirada,
mas tu sin pensar el daño que ibas a cometer me dijiste de frente
lo tuyo y lo mío no puede continuar he meditado y quiero terminar.
 
Sentí como si hubieras abierto tu bolso sacaras una daga
y me la clavaras en el centro del pecho, fue un dolor agudo
te mire e increpándote dije por que? porque lo haces?
me miraste y con lagrimas en tus ojos me dijiste, era necesario.
 
Yo con mi amor herido de muerte quería saber tus motivos
me diste tu explicación la cual no fue convincente para mi
a pesar de tus lagrimas tu argumento era totalmente hueco 
ya que un amor herido nunca escuchara excusas dudosas.
 
La realidad es que tu decisión estaba tomada de antemano,
aunque no quisiera que fuera así sentí crueldad en tu motivación
mi creer de tu actitud fue solo una, que nunca me amaste,
solo fui un capricho pasajero, pero eso, es parte de la vida.
 
Autor: Rudy González

 






       














© Brisa Diseños. Copyright, Diciembre 2002