Oh, Dios

Se que ves mi alegría al verla así hecha una mujer, pero cuantas lagrimas derrame en el comenzar de su hermosa vida. Oh, Dios, cuanto tiempo transcurrido cuantos dolores sufridos en esos primeros años, pero tú sabes que nunca baje los brazos y mi fe y mi oración siempre estuvieron presente. Recuerdo Padre cuando fue al salón de operaciones solo eran 11 días después de haber nacido y había que operarla del corazón, aquel cuerpecito de solo 11 días, te la entregué Señor y te pedí que me la salvaras.

Yo sé que me escuchabas como lo haces con todos en tus manos estaba el calmar mi desesperación Oh Dios cuanta incertidumbre en aquella espera hasta que el doctor salió y dijo salió bien, pero. Aquel, pero, me sonaba sombrío y esperaba, ella está bien pero tuvo una parálisis cerebral habrá que trabajar muy duro para su recuperación dijo el doctor y se marchó, empezó mi calvario pero con fe.

Fueron cinco años de terapias para gatear, caminar, hablar, en mis oraciones te decía yo te la entregue Señor dispón Tu, pasaron los años y me la entregaste un día completamente sana como una niña común y corriente. Se que hoy me vez feliz por sus quince años, pero ese fue tu propósito y aprendí mucho mas de ti mi fe nunca decayó y recuerdo que te dije; Padre pase lo que pase mi amor por ti nunca se quebrantara.

Oh, Dios, veía una vez más tu poder absoluto, pero sabiendo que es un poder justo para con todos yo que fui golpeado muchas veces en mi vida pero siempre me levantaba y te decía, no voy a perder la fe. Hoy día veo muchas personas que doblegan su fe y hasta llegan a proferir una frase de disgusto hacia ti Oh Dios, dales sabiduría a esas almas vacías te imploro por ellos que encuentren la verdad.

Esa verdad que es tan sencilla como llamarte, hablar contigo, tenerte en sus corazones yo por mi parte Padre nuevamente te doy gracias y mirando su foto digo, eso es un milagro de Dios.

 

Autor: Rudy González

Enero 25 del 2006